Hace siglos que los judíos son un pueblo perseguido, y hoy voy a contarles cómo el color amarillo hace años que se asoció con ellos para marcarlos. El color amarillo tiene un buen número de connotaciones negativas, pero en cualquier caso, lo que voy a contarles sería efectivo con cualquier color e igual de dañino.
El concilio de Letrán, allá por 1214, estableció que los judíos debían llevar un signo distintivo para poder ser claramente identificados por los cristianos y así evitar las uniones entre ambos. Esta medida se impuso generalmente a finales del siglo XIII. En 1269, en Francia, el rey impuso a los judíos la obligación de llevar “una rueda de fieltro o de trapo de color amarillo, cosida en lo alto de la ropa, al nivel del pecho, y en la espalda, con el fin de constituir un signo de reconocimiento, y que tendrá una circunferencia de cuatro dedos y una superficie lo bastante grande para contener la palma de la mano”. En otros lugares eran obligados a llevar un determinado tipo de sombrero.
La imagen que encabeza la entrada muestra a unos judíos, reconocibles por el sombrero que debían vestir obligatoriamente, siendo atacados por unos caballeros cristianos. Está tomada de una biblia francesa de 1255.