Hace dos años, Kenneth Rogoff y Carmen Reinhart escribieron un libro titulado
“Esta vez es diferente: ocho siglos de locura financiera”,
que entró en la lista de los más recomendados por The New York Times.
Rogoff, hoy catedrático de Harvard, y en los setenta jugador destacado de ajedrez, estuvo esta semana en Madrid para hablar sobre la crisis. Lo hizo en la Fundación Rafael del Pino.
Como economista que ha estudiado ocho siglos de catástrofes y euforias, Rogoff elaboró una lista de las suspensiones de pagos soberanas de la historia.
Y ¿cuál es el país que más suspensiones de pagos ha realizado en ocho siglos?
El reino de España. Nada menos que diez.
“Siento mucho decirlo, España se lleva el premio mundial en defaults“, dijo disculpándose. Según Rogoff, nuestro país ha suspendido pagos en 1557, 1575, 1598, 1607, 1627, 1647, 1809, 1820, 1831 y 1843.
O sea, empezamos con Felipe II, el hombre que tuvo un imperio planetario nada menos. Y al parecer, esto no ha
terminado.
A mí me salen algunas suspensiones más: la de 1864-1865, que fue épica, y la de 1939, cuando la República se derrumbó y el bando nacional no se hizo cargo de las deudas de sus enemigos.
Pero España no está sola. En segundo lugar en quiebras soberana está Francia con nueve suspensiones de pagos desde 1558. Alemania ha tenido tres.
La historia de las suspensiones de pagos contada por Rogoff es paradójicamente divertida. Cuenta que cuando presentó su libro en Japón, le llamó un alto cargo del gobierno para decirle que estaba equivocado, que Japón no había suspendido pagos en 1942. Y estaba el japonés tan convencido porque en ningún registro de los bancos ni de institutos oficiales salía esa información. Ni aparecía en los libros de texto.
Rogoff tuvo que sacarle una portada de The New York Times de esa fecha en la que se decía claramente que Japón había suspendido sus obligaciones internacionales. Y los japoneses le respondieron a Rogoff: “Ah, claro, lo suspendimos solo para los extranjeros”.
En su charla, Rogoff no fue muy divertido cuando hablaba del próximo futuro. La carga de la deuda va a lastrar el crecimiento del mundo durante años. Europa, con su población envejecida, o corta sus gastos sociales, o se enfrentará a una larga crisis. China tiene un modelo de crecimiento insostenible.
En fin. No se desanimen. Quedan 18 días para la primavera.
PD: El libro no está en español. Pero tienen aquí un artículo (abstract) del 16 de abril de 2008. Quizá no aparezcan los mismos cuadros que en el libro, pero es bastante
informativo.